miércoles, octubre 17, 2007

Mi personal día de la lealtad (a mi viejo)

Hace exactamente un año, el equipo médico de cirugía cardiovascular de la Clínica Olivos, a cargo del doctor Damonte, operaró durante varias horas a mi viejo, practicándole un triple by-pass coronario.

Tanto la cirugía, como su recuperación fue un éxito.

Una vez más, pude salir de ese centro de salud aliviado, como salí años antes con los tratamientos que recibieron mi hermana primero y luego mi mamá.

La experiencia del año pasado fue extrema, y realmente dura hasta que pudimos respirar aliviados con las noticias del propio cirujano.

Afuera, los restos de Perón eran llevados al mausoleo en la quinta de San Vicente y se generaba un enfrentamiento a tiros entre facciones de distintos gremios.

Atrás quedaron los momentos de sosobra, la busqueda de donantes de sangre, los días previos a la operación acompañándolo a él y a mi mamá en este difícil pasaje de nuestras vidas. Vaya también, mi saludo y agradecimiento a todos aquellos que nos apoyaron dondando sangre o por lo menos intentándolo.

Lo que me asombra de todo esto, es que desde que tengo recuerdo, si yo tuviera que nombrar una de las personas sobre las que mi papá siempre me habló como una eminencia y como un ejemplo de argentino exitoso y reconocido a nivel mundial es René Favaloro.

Favaloro fue pionero a nivel mundial en la práctica quirúrgica que mi papá recibió ( bypass coronario ) y hasta formó parte de la CONADEP, aunque luego renunció por diferencias de criterios.

Sé que una porción importante de la recuperación de mi viejo, tuvo que ver en la fé, la confianza y la credibilidad que tiene mi viejo en lo que hizo a lo largo de su vida Favaloro.

El resto lo hicieron los médicos, él y nosotros que lo acompañamos del primer al último segundo de su recuperación; intentando devolverle una ínfima parte de todo lo que ha hecho por nosotros a lo largo de su vida.

3 comentarios:

Alejandro dijo...

Fuerte lo que cuenta, sr.
Brindo pues, con ud, su día de la lealtad

Alguien dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Alguien dijo...

Brindo por tu papá, por vos y por tu familia.
Brindo sobre todo por los médicos que te devolvieron una versión "mejorada" de él después de largas horas de cirugía.
Y brindo por la lealtad.
"La lealtad es un corresponder, una obligación que se tiene con los demás. Es un compromiso a defender lo que creemos y en quien creemos. La lealtad es un valor, pues quien es traidor se queda solo. Cuando somos leales, logramos llevar la amistad y cualquier otra relación a su etapa más profunda. Todos podemos tener un amigo superficial, o trabajar en un lugar simplemente porque nos pagan. Sin embargo la lealtad implica un compromiso que va más hondo: es el estar con un amigo en las buenas y en las malas, es el trabajar no solo porque nos pagan, sino porque tenemos un compromiso más profundo con la empresa en donde trabajamos, y con la sociedad misma."
Insisto... brindo por la lealtad!
Uno de los mejores valores que tenes.
=)